por:
Claudio Olivares
Para declararse como ciclista urbano, no basta con que nos sepamos equilibrar en una bicicleta y circular un par de cuadras por la ciudad. En este proceso de aprendizaje y perfeccionamiento de habilidades, cometemos errores y desarrollamos malos hábitos que, mientras más temprano los identifiquemos, mejor será nuestro desempeño sobre la bici.
La idea de esta lista, es que hagamos una refexión partiendo de la autocrítica, que nos permita hacer conscientes nuestros errores para tomar las medicas correctivas correspondientes.
1 Circular contra el tránsito
Muchos ciclistas, ya sea por el viejo mito de la seguridad, o por acortar camino, circulan a contramano o contra el tránsito.
El sentido del tránsito es una de las normativas mas demócratica en lo que a legislacion del tránsito se refiere, además de sentar las bases de comunicación con otros vehículos al momento de circular.
Ciclrular correctamente permite efectuar nuestros trayectos de forma más segura.
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El sentido del tránsito
2 No usar luces durante la conducción noctura o usarlas, pero de manera incorrecta
De noche o en condiciones deficientes de luz, es necesario incrementar la visibilidad de los vehículos. Si no somos visibles, pasamos desapercibidos en la vía, quedando expuestos a colisiones.
Las luces además permiten comunicar la dirección que los vehículos llevan, es por esto que siempre debe ser utilizada una luz blanca o amarilla en la parte delantera y luz roja en la parte trasera.
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Luces
3 Estar ciego a las rutas alternativas
En la ciudad existen rutas con diferectes características. Algunas son vías de alto tránsito, otras tienen un uso menor. Está en nuestras manos poder optar por las rutas que nos parezcan más cómodas y seguras. No siempre la ruta mas obvia o evidente es la correcta, por lo que siempre debes estar atento a rutas alternativas donde puedas circular de forma fluida y tranquila.
4 No contar con un elemento de anclaje de calidad
Aunque a algunos les suene extraño, cuando te roban la bicleta creo que siempre el primer responsable es el duseño de la bici. De acuerdo, faltan estaciomaniemtos y lugares seguros para acomodar nuestras bicis, pero ¿te has preguntado con que dispositivo aseguras tu bicicleta? La mayoría de los robos de bicicletas suceden porque los ladrones aprovechan la oportunidad de cortar con gran facilidad la cadena o el dispositivo de anclaje que escogimos. Las cadenas o cables delgados y de mala calidad son fácilmente vulnerables, por lo que si quieres evitar dolores de cabeza y rabias culpando a los conserjes de un edificio o un local comercial, escoge un sistema de anclaje de calidad. Cuestan bastante mas caro que una cadena y candado corrientes, pero vale la pena la inversion, ya que son mucho menos vulnerables y disuaden la mayoría de las oportunidades de robo.
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Estacionando tu bicicleta
5 Abrigarse en exceso durante los días fríos
En la mayoría de las ciudades latinoamericanas y españolas las temperaturas no son extremas, como las que se pueden sentir en Canadá, Países Bajos o Rusia. Pero somos humanos e igual pasamos frío durante el invierno. Abrigarse demasiado causará que a las 5 cuadras de pedaleo comiences a sudar y humedecer el vestuario. El sudor luego se enfriará y quedarás expuesto a agarrar un resfriado.
Lo mejor que puedes hacer, es abrigarte de forma moderada, una polera (remera, playera…) de nylon como primera capa, una chaqueta de
polar y una cortaviento serán suficientes. Puede que pases algo de frío las tres primeras cuadras, pero después de eso ya entrarás en calor.
Un gorro, guantes y algo para proteger tus oídos también te ayudará a pedalear durante esos fríos días.
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Pedaleando bajo la lluvia
6 Pensar que tiene superpoderes
Por mas videos que hayas visto de los mensajeros en bicicleta, un ciclista urbano no tiene super poderes. Sí debemos desarrollar la habilidad de anticipar posibles situaciones de conflicto y tomar medidas para evitarlas. Indestructibles no somos, por lo que siempre es recomendable conducir responsablemente, atento al camino, a los otros vehículos y personas con las que compartes la vía.
7 Tener tu vehículo en malas condiciones
Frenos que no frenan, pedales y bielas sueltas, ruedas descentradas y desinfladas, etc., demuestran el poco amor que es posible llegar a tener por tu vehículo. La bicicleta es la extensión de tu cuerpo y como tal debe estar en perfectas condiciones para que puedas transmitir a través de él, la fuerza de tus piernas, lo que te permitirá desarrollar tus viajes con menos esfuerzo y mayor control del vehículo, lo que permite una experiencia mas segura y satisfactoria.
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8 Tener una bici no apta para tu tamaño
Usar una bicicleta que te queda grande o chica, junto con una mala regulación de la altura del asiento y el manubrio, sólo provocará que pierdas energía y deteriores tus articulaciones. Busca una bicicleta que sea acorde a tu talla y recuerda regular correctamente el manubrio y el asiento, cosa que el pedaleo te resulte cómodo y relajado.
Si vas a comprar una bicicleta, prúebala cuantas veces quieras. Si el vendedor no te lo permite, no vale la pena que compres tu vehículo en esa tienda.
9 Circular por la vereda
Las veredas son para peatones, las calles para vehículos. Si en los últimos años los autos se han tomado las calles, es porque de alguna manera nosotros lo permitimos. Tenemos el derecho a utilizar nuestro vehículo en la ciudad.
Si aún no te sientes con la capacidad para circular por la calle, e insistes en hacerlo por la vereda, hazlo con respeto y a velocidad moderada, teniendo en cuenta que es un espacio reservado a peatones.
10 Circular muy cerca de los autos estacionados
Los autos no son sólo problemáticos cuando están en movimiento, tambien cuando están detenidos, sus conductores pueden provocar situaciones complejas que debemos contemplar. La apertura de puertas es un claro ejemplo. Mantente lo suficientemente alejado de la zona de las puertas de un auto, tomando distancia del vehículo estacionado como si éste tuviese sus puertas abiertas.
Aprende a observar posibles movimientos en su interior, anticipando situaciones. Tambien debes aprender a ecualizar la distancia, teniendo en cuenta a los otros vehículos con los que compartes la vía.
11 No utilizar casco
Pese a ser una lista de los 10 errores que me parecen ser los más frecuentes, siento que el uso del casco no puede quedar fuera. Si bien no clasifico como error el no utilizarlo, el casco protejerá tu cabeza de lesiones que puedas sufrir en caidas individuales a velocidades no superiores a los 20km/hora. Es una medida que entra en juego cuando ya lo peor ha pasado. Es por esto que antes de defender casi religiosamente este accesorio, es importante que pongas en práctica los puntos anteriores y tomes tu seguridad con tus propias manos, haciendote responsable por tu conducción. No dejes en manos de segundos el disfrute de tus viajes en bicicleta.
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El casco de ciclista
